¿Tengo que facturar siempre como autónomo? 

Repasamos las principales formas de facturar como autónomo en España y cómo llevarlas a cabo. Cuando comenzamos una carrera profesional como experto freelance es imprescindible tener claros una serie de conceptos fiscales. Estos nos permitirán desarrollar nuestra actividad profesional con normalidad y evitar sanciones de la Agencia Tributaria. 

En este sentido, es clave contar con un servicio de asesoría fiscal. Y en Malt, para ayudarte a impulsar tu trayectoria como freelance, tenemos un acuerdo con Grupo CG Consultores. Todos los expertos freelance que lleguen desde nuestra plataforma tienen un descuento especial en asesoría. 

¿Qué debo hacer para empezar a facturar? 

A la hora de empezar a tributar como freelance el primer paso siempre va a ser el alta en la Agencia Tributaria. Esa es la única vía para empezar a emitir facturas. Además, existen varios supuestos y tendremos que identificar cuál es el nuestro: 

Ejerzo una actividad profesional habitual, ¿cómo puedo facturar?

¿Cuentas con uno o varios proyectos que se que se van a extender a lo largo del año? ¿Vas a obtener por ellos unos ingresos superiores al salario mínimo? En este caso desarrollas una actividad profesional habitual. 

La forma de darte de alta en Hacienda será a través del modelo 036 o 037. Con este modelo se confirman los datos personales. También la actividad realizada y las obligaciones fiscales a las que se va a estar sujeto. Puede incluir información como la superficie elegida para desempeñar nuestra actividad si se va a trabajar desde casa. O incluso la notificación de que vamos a realizar operaciones intracomunitarias. Una vez que se ha completado el alta en Hacienda, se tramita el alta en la Seguridad Social. A través del modelo A521, con una copia del DNI y otra del alta en Hacienda. 

En caso de cumplir con los requisitos que se solicitan, se podrá también solicitar la tarifa plana. Esta nos ofrece una tarifa de autónomos reducida a  60 euros al mes (dependiendo el momento en el que leas esto) durante el primer año de actividad. Y dependiendo de la Comunidad Autónoma podríamos ampliar a otros 12 meses más.  

Estoy cobrando prestación por desempleo, ¿puedo facturar como freelance?

Una de las grandes dudas en torno a la facturación de un freelance es si se puede compatibilizar el estar dado de alta como autónomo y cobrar la prestación por desempleo. Pues bien, la respuesta, en líneas generales, es sí. Y es que esta medida se plantea como una alternativa a la capitalización del paro. El objetivo es asegurar unos ingresos mínimos para personas desempleadas que deciden emprender. Eso sí, hay que tener muy en cuenta que esta medida puede compatibilizarse hasta 9 meses con el paro. Para evitar sanciones innecesarias, es importante que tengamos muy controlada esta fecha límite. 

El proceso sería el siguiente: después de darte de alta en Hacienda y en la Seguridad Social, tienes 15 días para comunicar esta novedad al INEM y evitar perder el paro. De igual forma, si cumplimos todos los requisitos nos podemos acoger a la tarifa plana.

¿En qué casos no es viable? Existen dos escenarios principales. El primero indica que, si estando en paro, voy a facturar a la empresa en la que estaba trabajando anteriormente, se entenderá como fraude. Y el segundo lo prohíbe cuando ya se ha utilizado esta compatibilidad en los últimos 24 meses.

Trabajo por cuenta ajena, ¿puedo facturar como freelance?

En este caso no solo es que sea viable sino que además es obligatorio facturar. El régimen general y el régimen especial de autónomos son compatibles y se exige estar dado de alta en los dos regímenes

Lo que entra en juego aquí es si ejercemos o no una actividad habitual. Si es habitual hay que darse de alta tanto en Hacienda como en la Seguridad Social. Si no es habitual solo tendremos que darnos de alta en Hacienda. 

Frente al resto de supuestos, aquí contamos con una ventaja. Y es que cuando se está dado de alta en el régimen general, la empresa paga por el trabajador una base de cotización presumiblemente alta. De esta manera es posible que la Seguridad Social nos devuelva el 50% de ese exceso de cotizaciones. Se hace automáticamente, sin tener que solicitarlo. 

Voy a desarrollar varios proyectos al año de manera intermitente

Se puede dar el caso de que al inicio del año sepamos que vamos a trabajar con una empresa en diferentes momentos del año, con las fechas ya establecidas. Esto nos va a permitir, hasta 3 veces al año, darnos de alta y baja y liquidar la parte proporcional en esos meses. 

Por ejemplo, si en el mes de mayo se realiza un proyecto que dura solo 5 días, se pagaría la parte proporcional de la tasa de autónomos solo durante ese período. Y si más adelante, en septiembre se empieza otro trabajo, durante unos 10 días, se volvería a pagar la parte proporcional. 

Eso sí, si al año siguiente quisieras darte de alta ya no se podría optar a la tarifa plana hasta pasado un tiempo. 

Y terminamos con la duda entre las dudas: ¿debería constituir una Sociedad como freelance/autónomo para tener una mejor fiscalidad?  

Esta pregunta surge porque, cuando se factura como empresa, se tributa por el Impuesto de Sociedades, que tiene un tipo fijo del 25%. Y si se factura como persona física, es decir, como autónomo, se tributa por el IRPF en función del volumen de rendimiento neto. Y aquí existe una escala en la que se podría tributar hasta el 50% 

Pero lo cierto es que, si nuestros ingresos son pequeños no nos interesa tener una Sociedad. Y es que lleva implícitos unos gastos de contabilidad, cuentas anuales, gestión, etc…que un autónomo no tiene. Y además, Hacienda nos exige que tengamos realmente una estructura de empresa para poder acogernos a esta modalidad. 

En definitiva, si estás interesado en llevar una facturación lo más ordenada y eficiente posible, te animamos a formar parte de la comunidad de expertos freelance de Malt. Y es que también somos una plataforma enfocada en la automatización de la facturación, en asegurar los pagos (cada proyecto está protegido con un seguro de responsabilidad civil de Hiscox) y en que estos sean ágiles, entre 5 y 10 días desde la validación del proyecto. Además, también podemos aumentar tu facturación ya que podemos ponerte en contacto con una gran cartera de clientes.